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Chaabane BENSACI
A pesar de la oposición del pueblo marroquí a la normalización con la entidad sionista, el rey Mohamed VI persiste y firma.
En un reciente mensaje dirigido al jefe del Estado hebreo, escribió: « Estoy encantado con las medidas adoptadas para reanudar los contactos entre nuestros dos países. Estoy convencido de que mantendremos este impulso para promover las perspectivas de paz para todos los pueblos de la región », asegurando que esta « renovación de los vínculos favorecerá la paz regional ».
Como Israel es bien conocido como campeón de la paz -los palestinos pueden dar fe de ello, a diario-, el rey marroquí puede felicitarse por una conjunción útil para su dominio del Sáhara Occidental.
Con una táctica aventurera, Mohamed VI, que preside el Comité Al Quds, donde los palestinos son asesinados y heridos a diario por el ejército sionista, afirma que « Marruecos, al igual que algunos países del Magreb árabe, se enfrenta a una agresión deliberada y premeditada…Aferrados a consideraciones obsoletas, los enemigos de la integridad territorial del Reino no quieren que Marruecos siga siendo la nación libre, fuerte e influyente que siempre ha sido », dijo.
En este contexto, no duda en atacar, con una falsa indignación, a « algunos países, sobre todo europeos, que figuran, paradójicamente, entre los socios tradicionales de Marruecos, (que) temen por sus intereses económicos, sus mercados y sus esferas de influencia en la región del Magreb ». Por ello, España, Alemania y Francia están llamados a « construir relaciones sólidas, constructivas y equilibradas ».
Además, denunció « una vasta campaña de denigración contra (sus) instituciones de seguridad », en alusión al software de espionaje Pegasus de la empresa israelí NSO, que según él son « acusaciones falsas e infundadas ».
Tal discurso confirma que Mohamed VI ya no está al mando, repitiendo las palabras de marionetistas adeptos a las mentiras y las contra-verdades.
Como si se econtrara en otra dimensión, menciona una « renovación del contrato » sobre el gasoducto, que expira a finales de octubre, aunque no tiene la aprobación de la parte argelina y no se ha tomado ninguna decisión. Porque espera aumentar la cantidad y el beneficio de los actuales 900.000 m3, predica en lo archifalso, disparando contra todo el mundo, excepto contra el Estado hebreo que se ha convertido en su mentor.
No cabe duda de que organizaciones como el Grupo de Acción Nacional por Palestina y el Frente Marroquí de Apoyo a Palestina y Contra la Normalización, en particular, habrán apreciado el mensaje del « descendiente del profeta », aliado incondicional de la entidad sionista, en Palestina y en África.
L’Expression, 22/08/2021